Ideas Profesionales

Este espacio esta destinado a personas interesadas en los temas de gerencia, liderazgo e inteligencia emocional y social

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Nombre: Jesus Pirela
Ubicación: Gran Caracas, Distrito Capital, Venezuela

Matemático, Ingeniero Civil, Economista. Conferencista en temas de Gerencia, Liderazgo, Inteligencia Social y Neuroeconomia. Especialista en Técnicas de Resolución de Conflictos Prof. de Postgrado en los mismos temas

viernes, abril 10, 2009

NO ES LO MISMO ESCUCHAR, QUE CALLAR

Aunque en ambos casos pareciera que el objetivo es el mismo, no lo es. El escuchar es un acto de premeditación positiva. Es estar interesado en oír lo que te hablan, es intentar comprender, identificar las posibles razones que tiene la persona para decir lo que expresa. Es sacar de esa comunicación lo que consideres positivo o favorable. O en su defecto, permitir al interlocutor un desahogo, ayudar a su estabilización emocional y encontrar un nuevo nivel de entendimiento.
Es importante, evitar establecer conversaciones sobre un punto de vista, donde el interlocutor, este absolutamente convencido de su razón. Es un desgaste emocional y físico y no te llevará a ninguna otra parte, que no sea a una frustración anunciada, una futura discusión o a una alteración anímica inducida no conveniente para ti.
El acto de escuchar, es una gestión, que necesita de mucha voluntad y preparación. Es estar consciente de que de ese modo, puedes obtener una fuente de conocimiento y aprendizaje rápido y a al alcance de la mano. Pero también, es una tarea donde se necesita la facultad, para mantener una actitud positiva, e inducir a un contagio emocional estable y armónico, con el otro (s) participante en la comunicación.
Es mucho más complejo y difícil escuchar que hablar. El que escucha, es el que realmente domina, controla y saca mayor provecho en una conversación. No se necesita estar de acuerdo con lo escuchado, solo es comprender y entender lo que se escucha. Observar las razones que tiene el interlocutor, para expresarse de ese modo. Es asumir una disposición apropiada en la conversación. En muchos de los casos, es una oportunidad para aprender, chequear alguna duda y aclararla. O simplemente asimilar algo que ignoras, y encontrar razones y detalles, que contribuyan a construir algo desconocido por ti, pero importante y necesario.
El saber escuchar, es tener la capacidad, de aprender de inmediato, de experiencias no vividas, o de las que habiéndolas experimentado, necesitas reforzarlas y que, en la mayoría de los casos, están muy cerca de ti. Es una de las maneras más rápidas de obtener conocimiento o información, y lo mejor es, su relativa facilidad de consecución. Toda persona, por más humilde que ésta sea, no importando su grado de instrucción o su nivel intelectual, tendrá muchas cosas que expresar, de lo que ha vivido, experimentado, aprendido o sencillamente, obtenido por influencia, intuición, sentido común, habilidad o por imitación.
El callar, en cambio, es un acto de limitación, de sumisión u obediencia en la mayoría de los casos, y de impotencia temporal en otras oportunidades. Esto sucede, por no tener a la mano las herramientas adecuadas, y no encontrar los recursos convenientes, en una especial situación. Es no saber escuchar y solo reaccionar, pretendiendo imponer un punto de vista, y nunca teniendo como objetivo, aprender algo nuevo.
El saber escuchar es una actitud positiva de alto nivel. Hay mucha literatura que nos habla sobre este tema, y nos expresa, que somos esclavos de lo que decimos y amo de lo que pensamos y callamos. Es usar la empatía, como factor relacionante y adaptativo, no solo de la persona que escucha, sino de la que expresa sus sentimientos. Es un estado de conexión efectiva, que solo se logra si una o todas las personas involucradas, saben escuchar y utilizan su influencia para el bien colectivo.
El saber escuchar, no solo es oír las palabras del interlocutor, es también saber leer su lenguaje corporal. Tener un entendimiento completo de lo expresado por aquel que nos habla. Es sacarle el mejor provecho, a una de las herramientas más valiosa del ser humano: “la comunicación”. Dicen los estudiosos de la evolución humana, que supuestamente, una de las causas del crecimiento diferencial del tamaño del cerebro en el humano, en comparación con el resto de los simios superiores, es su capacidad para hablar y comunicarse. Es expresar sus deseos y poder transmitir sus experiencias a los demás.
jesuspirela9@gmail.com