USO DE LAS EMOCIONES, COMO ARMA O COMO HERRAMIENTA

Las emociones, desde hace realmente poco tiempo, dejaron de ser para nosotros, unas simples alarmas, que aparecían en momentos de peligro, ansiedad, felicidad u de ira, para convertirse en herramientas o armas imprescindibles en la toma de decisiones, en momentos de necesidad extrema y de inminente ayuda. Desde la publicación de los libros sobre “Inteligencia Emocional y Social” de Goleman, se ha despertado, entre los estudiosos y entendidos, como también de algunos aficionados, en un tema donde expresar, todos los eventos, en las cuales intervienen estas perturbaciones del ánimo.
Luego llegó la era de los estudiosos del cerebro y sus procesos neurológicos. La Neurociencia nos explicaba, la manera en que se comportaban las neuronas, cuando aprendíamos algo o experimentábamos una nueva experiencia. Ellos nos revelan, como se realizan las conexiones entre neuronas y en que localidad del cerebro se encuentra esa activación. Fueron los resonadores funcionales, los que nos señalaban en gráficas, en tiempo real, cual zona del cerebro estaba activa o se disparaba - según su expresión- cuando recordábamos algo o pensábamos en alguien, por ejemplo.
Pero hubo más adelantos y participaciones en la neurociencia. Se adicionaron la psicología, la psiquiatría y la economía. En esta etapa, se estudia nuestras reacciones mentales, al tomar decisiones, sobre todo cuando hay riesgos económicos o crisis políticas. La neuroeconomía, aparece, cuando hay que elegir entre varias alternativas financieras, y nos ofrecen sus disquisiciones y además, nos demuestran, el modo determinante, en que dichas emociones intervienen en la toma de decisiones económicas. Anteriormente, los economistas, consideraban, que todas las decisiones que tomábamos, eran un acto netamente cognitivo. Donde intervenían únicamente, las zonas cerebrales, dedicadas al análisis, la lógica, etc. Nada más lejos de la realidad.
Se ha demostrado científicamente, que en toda acción humana, participan, tanto la parte cognitiva del cerebro -neo-cortex-, como la parte emotiva -el sistema límbico (hipocampo, amígdala, etc.-. Es aquí, donde comprendimos, que estas alarmas, se pueden usar, tanto como herramientas para solventar momentos críticos, o como armas, para lograr oscuros propósitos, entre las personas involucradas. Todo dependerá de la intención.
Laboralmente, un jefe, gerente o en general, un líder, sea este social, laboral o político, puede hacer uso de esa herramienta/arma, para conseguir buenos/malos objetivos. Un buen líder, encontrará en esas emociones despiertas, un terreno fértil para nutrir el camino, por donde se conducirá él y sus seguidores. Los resultados serán beneficiosos para todos. Pero si los propósitos no son nobles, la manipulación emocional, los llevará al abismo y la destrucción colectiva. Recordemos, que no siempre las decisiones que tomamos, son las que más nos convienen. Es la parte irracional de ese albedrío personal.
Jesuspirela9@gmail.com