EL ENGAÑO EN LA COMPETITIVIDAD

Siguiendo las teorías de Charles Darwin sobre la "selección natural", narradas en su libro El origen de las especies y habiendo leído una entrevista al Psicólogo Robert Kurzban, me pareció muy interesante, como encaja perfectamente en estas opiniones evolucionistas, el papel del engaño.
Según ambas referencias, el ser humano es por naturaleza competitivo, como lo son las otras especies que luchan por sobrevivir, adaptarse a los cambios del ambiente y evolucionar a niveles superiores de efectividad y eficiencia. Y como consecuencia, dejarle a sus descendientes, la carga genética necesaria para capacitarlos a continuar evolucionando.
Ahora que la neurociencias, ha logrado adentrarse cada vez más en las profundidades de cerebro e ir averiguando paso a paso, el proceso interno que se utiliza para producir desde los pensamientos y las distintas emociones, hasta modificar el animo, la actitud y la manera de interpretar la realidad, etc, etc, nos damos cuenta que el engañar a los demás, como el engañarse uno mismo, es básico para surgir como especie, sobre todo en esta sociedad de relaciones complejas y competitivas; donde conseguir una buena pareja y mas aliados, es imprescindible para el éxito personal.
El engaño ha sido utilizado por todas las especies para sobrevivir: desde el pez que utiliza como carnada un apéndice semejante a un gusano cerca de su boca para su alimentación o como las franjas negras y blancas de las cebras engañan a las moscas del sueño para no ser picadas, o el mimetismo utilizado por muchos animales, para no ser presas fáciles. Las mismas plantas, utilizan el engaño para ser polinizadas, al utilizar las formas, colores o el aroma, atraer a los insectos y realizar su cometido, el de conseguir reproducirse.
También los individuos engañan a los demás o a si mismo para aparentar una imagen sobrevaluada de si y de esa manera ir con ventajas, al convencer a los demás de ser mejores o superiores. De esta forma, se va con un posible beneficio, al competir con los demás, que intentarán aplicar el mismo artificio. Al fin y al cabo, hemos sido creados para competir con todos los que nos rodean, e intentar continuamente de engañar a los demás, de cosas que no son del todo ciertas y de ese modo, ser ganadores y sobrevivir.
Por ejemplo, el pensar que eres mejor que los demás, en alguna cosa en particular, te obliga a comportarte de ese modo e intentarás que los que te rodean se convenzan de ello y se comporten como que así fuera. Pero esa misma conducta la asumen los demás competidores, entonces el que lo logre, será el beneficiado por la mejor interpretación de la cualidad señalada, y se acentúa este hecho, más aun, cuando vivimos en una sociedad donde nos relacionamos, nos influimos y competimos.
En otro orden de ideas, cuando se produce un engaño en un subsistema, solo causará daños al sistema general. Por ejemplo, cuando en una empresa, un departamento entra en competencia con otro de la misma compañía, podría ser que uno de los dos engañe al otro y satisfaga su objetivo, pero en definitiva es la empresa la gran perdedora, un resultado altamente negativo.
Debo advertir, que la idea, no es estimular a que se cometan engaños o se mienta en todas las situaciones, porque las consecuencias no siempre son positivas. En el caso particular de las personas, ellas podrían detectar la mentira o una situación de engaño, en tiempo real. Esto es debido a las neuronas espejos, las cuales detectarán la intención, desenmascarandote, eliminando su efecto y obteniendo como resultado inmediato, un desprestigio social, que se hará colectivo rápidamente .
Piénsalo antes de engañar o mentir, el precio en relaciones y adaptación, es alto y perjudicial.

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