COMO LA CONTEMPLACIÓN A LA NATURALEZA ACTIVA LA INTUICIÓN

Cuantas historias conoces que han sucedido estando una persona caminando u observando a la naturaleza en cualquiera de sus manifestaciones, y de repente le ha llegado a la mente una inspiración, una idea, una solución a algún problema o aclara una duda. Se han publicados historias que narran de como un científico o un artista famoso, estando a solas viendo o admirando los paisajes naturales o caminando por un sendero en un parque o jardín, sin estar pensando en nada, solo estando absorto en el silencio y la belleza del entorno, ha dado con una solución a algo que deseaba resolver o de repente se le aclara una duda o encuentra la inspiración que necesitaba para crear su obra. Son muchos los casos como estos. Y me pregunto: Cual o cuales podrían ser las causas de que esto suceda y especialmente cuando está en ese ambiente natural. Se sabe que la vía en que el subconsciente se comunica con nuestra parte consciente es por medio de la intuición. Esta tiene diferentes maneras de manifestarse, puede ser una corazonada, una idea, o simplemente una decisión repentina que tomamos. En muchísimos casos, escucharla y seguirla se logran buenos resultados o por lo menos bastante cercano a lo buscado. El asunto es que esta comunicación es totalmente involuntario y repentina. No hay manera de hacerla conscientemente, ese camino está por los momentos cerrado, carecemos del conocimiento o del talento necesario en estos para realizarlo. Pero las investigaciones realizadas por neurocirujanos recientemente, me permite analizar y buscar por mi cuenta alguna razones para encontrar alguna explicación satisfactoria y con alguna base psicológica, aunque sea experimental e intuitivo. Esa investigaciones expresaban algo muy importante, unido a que conocemos la maleabilidad o plasticidad del cerebro y saber que el cerebro no deja de crear nuevas neuronas, como se pensaba anteriormente y que la producción duraría toda la vida activa del humano. No importando su edad. Si estás en posibilidad de aprender algo, dirigir tu atención y concentración en un acto u objeto o eres capaz de sentir una emoción intensa, es suficiente para que puedas crear más células nerviosa. Esos estudios recomiendan algunas cosas que serían buenas para esos efectos. Aparte de una buena alimentación, hacer ejercicios, tomar suficiente agua, dormir bien, dedicarse a una acción intelectual y divertirse sanamente, la neurociencia recomienda algo no conocido, aunque si experimentado por muchas personas y es, que el contemplar a la naturaleza, sentir sus sonidos y aromas, admirar su belleza en cualquier de sus manifestaciones, hacía que el hipocampo, que es el sitio del cerebro dedicado al aprendizaje, la memoria y las emociones, producía la creación de nuevas neuronas. Y esta es una estupenda noticia para todos, y más para los amantes de la naturaleza en todas las formas que ella se manifiesta. La explicación más cercana hasta ahora sobre la activación de la intuición, expresa que la contemplación crea un estado anímico adecuado para que este fenómeno se materialice. Aquí entra en acción ese órgano extraordinario y aún desconocido en muchas de sus complejas formas de proceder. El cerebro encuentra al estar en esta actitud o disposición menta, un terreno que favorece la meditación y ella conlleva a encontrar tu yo interior y sentirte más cerca de lo que te rodea. Entra en una región, donde esa comunicación introspectiva se hace más efectiva. Es en esta circunstancia donde interviene directamente la intuición. Se piensa que, al estar en un estado de concentración o de compenetración con la naturaleza, se crea ese puente que le permite a la intuición poner en contacto al subconsciente con nuestra consciencia. Creando un enlace entre ellos dos facilitando que ideas, pensamientos y emociones diversas salgan y produzca satisfacciones y bienestar. Recordemos que nuestro subconsciente es el depósito de todas nuestras experiencias y conocimientos adquiridos en nuestro tiempo de vida. Allí está todo lo que conscientemente sabemos y muchísimo más de lo que nos imaginamos. Sabemos que nuestra parte consciente, como el subconsciente tienen velocidades capaces de procesar los bits de información completamente diferentes. Este vínculo crea la famosa “zona”, que supuestamente es el lugar donde más se logra una concentración adecuada para la creación de todo género, sea este artístico o científico, por lo cual tanto genera la inspiración del artista o del escritor y como también permite encontrar la solución a un dilema o la aclaración de una duda científica o personal. Hay un caso de un matemático que estuvo más de siete años intentando solucionar un problema, en este caso era la famosa conjetura de Fermat, les narraré lo que cuenta él mismo cuando eso le sucedió. Caminaba por un sendero lleno de vegetación cerca de un arroyo y de repente y sin pensar en el dilema, llegó a su mente la solución de tan complicada paradoja, lo que le hizo ganador del premio semejante al Nobel en matemáticas que es el premio Abel. El matemático fue Andrew Wiles y lo realizó en septiembre de 1994. Son muchos los hallazgos, descubrimientos o ideas revolucionarias, que le ha llegado a la mente a una persona y de manera súbita, y coincide en que la mayoría ha estado en contacto con la naturaleza, así sea en la playa, la montaña o en su jardín. Recordemos que Isaac Newton, uso una simple observación al estar sentado debajo de un manzano y cayó una manzana a sus pies, Ese pequeño detalle fue el detonante de uno de sus máximos descubrimientos, como sus famosas leyes y teoría sobre la gravedad entre otros grandes descubrimientos,. Demostró las leyes naturales que gobiernan el movimiento de los cuerpos en la Tierra y las que rigen los movimientos de los cuerpos celestes, por supuesto causado por la gravedad. Todos hemos experimentado de alguna forma la participación de la intuición, de la corazonada, de las vocecillas que indican o señalan un camino y transitándolo logramos conseguir algo que buscábamos. Admira, contempla a la naturaleza, disfruta de sus sonidos, aromas y formas y de algún modo tendrás su respuesta. Ver la naturaleza es algo que realizamos con mucha frecuencia, aprovechemos esta vista y dejemos que la mente en su reflexión actúe y nos permita encontrar cosas admirables que multipliquen la tranquilidad, la satisfacción mental y la paz. jesuspirela9@gmail.com