Ideas Profesionales

Este espacio esta destinado a personas interesadas en los temas de gerencia, liderazgo e inteligencia emocional y social

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Nombre: Jesus Pirela
Ubicación: Gran Caracas, Distrito Capital, Venezuela

Matemático, Ingeniero Civil, Economista. Conferencista en temas de Gerencia, Liderazgo, Inteligencia Social y Neuroeconomia. Especialista en Técnicas de Resolución de Conflictos Prof. de Postgrado en los mismos temas

domingo, junio 15, 2008

TODO INFLUYE EN EL COMPORTAMIENTO HUMANO

Todo influye en la formación de la persona, sobre todo en los niños más pequeños. Nacemos con un cerebro estándar, si así lo podemos expresar. Significa que cuando nacemos traemos en nuestros cromosomas, toda la carga genética transmitida por nuestros padres y eso nos hace ya diferentes y únicos. El cerebro al nacer, pesa aproximadamente unos 400 gramos y en los primeros dos (2) años llega a pesar unos 1000 gramos y su total formación y madurez dura un poco más de 20 años y llegara a pesar aproximadamente entre 1300 1400 gramos. Es el órgano del cuerpo que tarda más en desarrollarse y madurar.

Desde un poco antes del nacimiento, el cerebro comienza a procesar información, las primeras informaciones que recibe son las caricias o la voz de los padres, sobre todo de la madre, que es la que más tiempo pasa junto a él, puede recordar algún sonido, principalmente de música. Luego del nacimiento, la información es ilimitada, todo llama la atención a aquella computadora nuevecita que graba, procesa y detiene su vista a todo movimiento. El niño inicia de esta manera su formación, de esas observaciones, dependerá su estado mental y su actitud ante la vida.

Es tan importante este aprendizaje y del cual tienen una invalorable participación los padres. Todo es observado por el niño, un gesto, una mirada, una expresión, todo es absorbido y guardado en el cerebro. El niño, es capaz de percibir hasta si su corazón está latiendo más rápidamente de lo normal, por algún disgusto anterior, por ejemplo, el sentirá su ansiedad, su estado anímico y esa información lo hará reaccionar de inmediato. Esa es la causa, que muchas veces un niño, se comporta de manera extraña, no se sonríe o llora pero sin ganas, el sabe que algo sucede y no sabe que es, cae en un terreno inexplorado y donde desconoce que hacer, entonces llama la atención a las personas que siempre lo han protegido y es allí donde, normalmente aparecen los padres para calmarlo y eso se consigue al retomar una actitud serena, amorosa y feliz, casi de inmediato el niño se calma.

Es por eso la importancia de que los padres sepan esto, y de esta manera tratar de que en el mayor tiempo que pasen junto al niño, se le transmita cosas que el irá absorbiendo progresivamente y que ese aprendizaje, le envíe las señales adecuadas para su formación y desarrollo. Las más indicadas, aunque es imposible hacerlo de forma consciente todo el tiempo, son las caricias, las palabras de amor y con amor, sonrisas, gestos de agrado, etc., son cosas que el va conociendo e imitando y al verlas o escucharlas muchas veces, la podrá repetir a su manera, además de que aprenderá que son expresiones y formas de comunicarse que le producen placer y de las cuales se sentirá protegido y seguro al recibirlas y de quien las expresa.

Si por ejemplo, ustedes al caminar por un parque o en cualquier sitio, observan a un padre con su hijo, pero la representación es la siguiente: el padre camina delante del hijo, el lo seguirá, pero hay cosas más que el niño percibe. El se siente desprotegido, inseguro y solo tratará de alcanzar a su padre o que éste de alguna forma lo vea, que lo tenga en su perímetro visual, si eso no sucede, el se sentirá angustiado y temeroso. Pero eso no es todo, usted que lo está observando, de inmediato se dará cuenta del estado del niño, lo vera de esa misma forma, solo, abandonado, desprotegido, buscando ayuda en su padre. Si es habitual esa escena en los padres, ese niño aceptara que esa es la forma de ser y así se comportara. Será una persona temerosa, timida, llena de ansiedad e insegura. Dolorosa escena verdad, pero que lamentablemente sucede muchas veces y en todos lados.

Voy a ese pequeño y frecuente ejemplo, para que podamos darnos cuenta el grado en que nuestro comportamiento (y del entorno) influye en la vida del niño y en su futuro. Es tan importante nuestro accionar ante los niños, que cualquier detalle, por insignificante que sea, es capaz de marcarlo para toda su vida. Como no todos nuestros actos son conscientes, debemos considerarlo una prioridad en nuestro accionar para con ellos, ya que seguro será el regalo más preciado dejado para ese niño, que servirá para su supervivencia, su manera de decidir, de comportase y de vivir su vida.

Se ha demostrado científicamente, que el entorno, el sitio donde habitamos, estudiamos o trabajamos, influye también como los padres, familiares y amigos, de una manera tajante en la formación del ser humano. El entorno puede hacer desactivar o activar algún talento o alguna carga genética que llevemos dentro. Lo observado, lo aprendido interviene de manera concluyente en nuestra vida y de la manera en que la disfrutaremos o no.

jesuspirela9@gmail.com