LA IMPORTANTE INFLUENCIA DEL AMBIENTE EN NUESTRA EVOLUCIÓN

Sabemos que, en nuestros genes traemos una carga hereditaria, que influirá en el desarrollo de la especie. Pero también sabemos que el ambiente, donde se desenvuelve el ser humano, proporcionará el aprendizaje necesario, que repercutirá de manera determinante, en toda esa adaptación necesaria, para el crecimiento y desarrollo de todos nosotros, como especie desarrollada y cooperativa.
La mayor dimensión del cerebro humano, en comparación con los otros simios superiores, se debe, según las últimas investigaciones, a que como animales sociales, necesitamos conocer a los integrantes del grupo al que pertenecemos. Se necesita conocer al grupo, para entender su comportamiento, compartir información, ayudarse mutuamente, formar alianzas y realizar pactos individuales o colectivos, que contribuirán en el futuro, a la obtención de niveles más altos en la jerarquía.
Por ejemplo: Saber a quién le debemos un favor, cuales son amigos y cuales los enemigos. De ésta forma, ese aprendizaje social complejo, nos permite ir ascendiendo en la escala social, obtener alimentos, tener seguridad, privilegios, etc., y de esa manera lograr resultados positivos, en las metas u objetivos propuestos.
Vivir en grupos, es importantísimo para el desarrollo y crecimiento de las especies sociales. Sobre todo el cooperar. Ese simple, pero importante característica, permite lograr las mayores satisfacciones individuales y colectivas. La especie humana, tiene como privilegio, ser la única especie social, en tener esta cultura en ser cooperativista y acumulativa. Hay otras especies sociales, como las hormigas, las termitas, los orangutanes, etc., que le deben su existencia a la cooperación, pero no tienen la capacidad de que este aprendizaje sea acumulativo, ellos repiten actividades por instinto animal.
El ser humano, aprende de los otros, los puede imitar, aprende el uso de las herramientas, o se trasmiten sus experiencias al comunicarse entre sí. Todo esto es básico para su adaptación. Cada uno se encargará de enseñar a otros, de estos pasos importantes y necesarios, para el desarrollo y continuidad, de la especie gregaria que somos.
Vamos a realizar un ejercicio de imaginación. Piensen ustedes que viven en algún lugar de la tierra. Ella podría ser desértica, selvática, o polar. En cada caso, sus habitantes, son influidos por esas características climáticas. De tal manera que: nuestros hábitos alimenticios, nuestra forma de vestir o el tipo de vivienda utilizada, por ejemplo; es determinada por el ambiente donde estamos. Igual, es nuestra cultura. Ella tendrá en el entorno un estimulo importante, que nos predispondrá a tener una determinada conducta social.
Todo esto será complementado con la crianza, los estudios, amigos y las propias experiencias vividas. Todo estará en ese escenario, donde participamos. Es primordial, saber decidir lo conveniente y tomar de todo eso lo que más nos ayude a evolucionar, y que además nos guste y nos haga feliz.
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